El ayuntamiento ha intentado poner soluciones a este asunto. El ayuntamiento está alertando a los conductores de que hay previsión de contaminación, por lo que intenta convencer a los conductores de usar el transporte público para reducir esas emisiones de dióxido de carbono.
Según ecologistas en Acción, varias de las estaciones podrían superar los 200 mg/m3 de dióxido de Nitrógeno, esta cifra es una cifra preocupante para la población, ya que si no se tiene precaución estos niveles se podrían disparar en pocos meses.
Gracias a las lluvias y el viento que se prolongarán en gran medida, permitirán rebajar los niveles de contaminación del aire tanto en el dióxido de carbono como en el dióxido de nitrógeno, ya que el viento de dirección oeste-sudoreste arrastrará la contaminación en dirección a Guadalajara.
Una vez pasado esto se espera de que las tasas registradas sean menores, ya que anteriormente llegó a alcanzar los 100 microgramos por metro cúbico.
Respuestas de los ciudadanos ante esta situación
Esto ha echo que Madrid amplíe la red de suministros de automóviles menos contaminantes.
Estos automoviles permitirán a los conductores repostar gas natural comprimido, un combustible que emite un 75% menos de nitrógeno y un 85% menos de partículas que el gasóleo, ya que estos son los dos mayores problemas en Madrid.
Los vehículos movidos por estos conbustibles son también más silenciosos y emiten menos gases de efecto invernadero.
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